Nueva fecha de la
Primera Nacional.
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Foto: Prensa Quilmes. |
El comienzo del duelo mostró a un local resuelto a abrir el
marcador desde los primeros minutos: Federico Anselmo a los 4' quedó enfrente a
Cristian Lucchetti y definió, pero el tiro fue bien tapado con el cuerpo. Ambos conjuntos se prestaban la pelota, levemente mejor parado el equipo de Mario Sciacqua. Sin embargo, a los 12' llegó
la primera clara para la visita, tras una larga habilitación de Fernando Brandán, quién conectó con los pies de Juan Tevez. Con ángulo cerrado, el delantero definió abajo y
raso, solo para que Milton Álvarez, golero local, responda sin complicaciones.
El primer grito apareció en el cuarto de hora: un pase que
quedó corto de Franco Malagueño avivó al defensor rival Iván Erquiaga, quien se
echó una corta carrera y con un centro se halló con el botín de Federico
Anselmo, quien cambió la dirección de la pelota y dejó totalmente descolocado a
Lucchetti. Una vez más, un error propio truncaba los planes de Darío
Franco; y Quilmes, aprovechando la desazón del contrario, pudo estirar la
ventaja en dos oportunidades: primero con un disparo de Tomás Sandoval desde
afuera del área y después con el mismo Sandoval en un intento de chilena que pegó en el
travesaño.
Con ese panorama, Gimnasia jugó el resto de la primera parte
retrocediendo muy mal en las jugadas de contragolpe, desordenado en el medio y
sin ideas claras arriba. El Lobo no
había funcionado y se fue a los vestuarios cayendo por la mínima.
El complemento encontró al Cervecero distribuyendo el tiempo para mantener el resultado y a Gimnasia más compuesto con respecto a la primera
mitad. Con bastante convicción y ungido de igualar el marcador, los visitantes
sin un proyecto nítido empezaron a ocupar más el campo adversario.
El empate llegó en una jugada de pelota parada tras un
centro del ingresado Exequiel Beltramone a los 14'. Liberándose de la marca
individual y de manera limpia, Guillermo Cosaro con un frentazo puso en tablas
de nuevo el partido e hizo explotar el banco de suplentes albiceleste. Embalado, el Lobo
se tiró bien arriba y buscó ya no llevarse un punto sino los tres. A los 19' Leandro
González de zurda remató en el área chica, pero Álvarez le negó la alegría. Sin
dudas, el gol había servido de inyección anímica y el conjunto jujeño
disfrutaba de su mejor momento.
Desfortunadamente para los de Franco, el local volvió a ponerse arriba. Anselmo
desde afuera del área dejó sin chances a Lucchetti con un tiro inalcanzable.
Golazo de otro partido y balde de agua fría. En los últimos minutos el equipo no se desenchufó e intentó
hasta el final forzar la igualdad. Hugo Soria a los 41' se tuvo confianza y
reventó el palo con un bombazo desde un poco más delante de la mitad de la
cancha. No hubo suerte. Existieron un par de llegadas más pero sin peligro ni
precisión.
Quilmes no hizo mucho mérito para llevarse el partido, pero
supo aprovechar el error del rival para
encontrarse con el primer gol y dar con el buen talante de su capitán Anselmo,
ahora goleador de la competencia, para sellar el triunfo. Gimnasia tiene su
próximo compromiso contra Brown de Adrogué, donde más que nunca necesita
conocer la victoria para disipar el aire de tensión que corre en el cuerpo
técnico.