El Lobo cumple ante su gente.
![]() |
Foto: Prensa GyE. |
Tras una presentación floja en Buenos Aires, el Lobo regresaba a Jujuy mentalizado en dejar de lado el traspié sufrido y lograr en el 23 una victoria que lo reposicione en la zona de reducido, esto de cara al final de la primera ruada de la Primera Nacional. A pesar de la localía, la tarea no parecía sencilla, ante un San Miguel que, siendo uno de los recién ascendidos, viene cumpliendo una campaña sorprendente.
Ante tal escenario, el primer tiempo inició cumpliendo las expectativas locales. Gimnasia se mostraba superior e incomodaba al Trueno con facilidad, principalmente a través de centros al área. La primera que tuvo fue un cabezazo de Agustín Palavecino que rebotó cerca de la linea de cal antes de ser despejado. En otro tiro al corazón del área, entre Franco Camargo y Cristian Menéndez se estorbaron evitando la definición, mientras que Mauro Osores esforzó el manotazo de Joaquín Pucheta cuando ejecutó un disparo que se decía centro pero casi se mete entre los tres palos.
San Miguel, por su parte, no se animaba en materia ofensiva y sus intentos dejaban mucho que desear. El más claro del primer tiempo fue un cabezazo de Ariel Kippes que se fue por arriba del travesaño. Parecía, sin embargo, que el local empezaba a darle un poco de aire, hasta que se le otorgó un tiro libre a Luis Miguel Rodríguez cerca del área. El Pulga tuvo un primer intento, haciendo que Pucheta se tire por lo bajo para sacarla, pero el árbitro Adrián Franklin no había dado la orden. En el segundo disparo, el tucumano eligió cambiar el palo y la clavó en la parte baja del travesaño, ingresando la pelota tras el rebote. Magistral tanto para el 1-0 albiceleste.
En desventaja, la visita se mostró descolocada y prueba de ello fue el grosero error de posicionamiento gracias al cual el Lobo marcó el segundo. Tras el despeje de un tiro de esquina en propia puerta, Jorge Juárez la agarró y condujo el contragolpe. Entrando al área cedió para Hugo Soria, quien en lugar de disparar deslizó un pase de lado a lado para que Emiliano Endrizzi la empuje a los 36'. 2-0 y a los vestuarios.
El complemento arrancó con una lavada de cara del equipo de Gustavo Coleoni. De hecho, Iván Antunes, ex Gimnasia, logró un remate donde Alan Sosa dio rebote y apareció Jorge Ferrero para poner el descuento, pero el asistente Guido Córdoba consideró muy erróneamente que estaba adelantado. San Miguel continuó hostigando el área jujeña por gran parte del segundo tiempo, generando riesgo en un cabezazo de Facundo Cardozo y en un tiro peligroso de Antunes.
De todas maneras, mientras más pasaban los minutos más firme se la veía a la defensa, sobresaliendo la figura de Osores en su regreso a la acción tras su lesión. Ya cerca del final el desgaste de ambos conjuntos era evidente y solo quedó tiempo para sellar una goleada, quizás exagerada. Agustín Palavecino fue derribado por Peter Martínez, otro ex lobo, en el área. Menéndez, falto de confianza por la falta de gol, se encargó y convirtió el 3-0 a los 37'.
Así, con varios puntos altos y un equipo que de a poco se muestra maleable a las circunstancias, Gimnasia sumó otra victoria y sigue a paso firme en su estadio, donde con Módolo sumó tres victorias en tres juegos. La deuda como visitante se pondrá a prueba el próximo sábado, donde en duro encuentro la escuadra albiceleste visite a Quilmes en Buenos Aires.