Para ilusionarse con la clasificación.
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| Foto: Gastón y René Contreras para LNW. |
Tras el golpe que supuso la apática caída en Mendoza, el equipo de Matías Módolo llegaba obligado a agrandarse ante las circunstancias de este encuentro vital ante Ferro. Este duelo, el primero de una sucesión de partidos con otros aspirantes al reducido, enfrentaba al 4º y al 5º, por lo que el triunfo para cualquiera significaría una movida gigante para asentarse arriba de la tabla, a casi nada de final
El planteo del entrenador local entendió que se debía volver a sus orígenes, con Mauro Albertengo y Cristian Menéndez compartiendo la zona de ataque. Y esta variante no tardó en tener sus frutos, pues de dos tiros libres el Lobo tuvo sus primeros aproximamientos. Al 1' Albertengo cabeceó potente pero elevado al arco de Mariano Monllor, mientras que a los 4' el Polaco casi sorprende con un tiro de carambola salvado por el arquero visitante.
Más en partido Gimnasia siguió con un nivel superior al de Ferro y quien tuvo su chance fue Agustín Palavecino, quien remató desviado a los 8' tras una buena contra liderada por Francisco Molina. Sin embargo, a los 14' con una jugada totalmente fuera de contexto de lo que venía sucediendo llegaría la ventaja. Hugo Soria capturó la pelota en tres cuartos tras una mala salida de Martín Rodríguez y se animó, colando el disparo en el ángulo inferior izquierdo de Monllor. 1-0 merecido para el Lobo, quizás no por las vías esperadas.
En lo que siguió de la primera mitad Ferro no supo encontrar respuesta a encontrarse en desventaja, mientras que el local frenó un poco la intensidad (hubo pausa para hidratación por el pesado calor de la tarde jujeña), Aun así, Albertengo y Agustín Palavecino se hicieron notar cada vez que pudieron en el ataque, particularmente el primero que incluso llegó a tener dos roces con la defensa visitante que algunos consideraron meritorias de penal.
Lo cierto es que si algunos esperaban alguna reacción efectiva del equipo de Aníbal Biggeri en el complemento, terminaron decepcionados. El Verdolaga siguió muy flojo en la generación de oportunidades y con poca cobertura en la marca. Crédito de esto último fueron la clarísimas oportunidades que tuvo Nicolás Dematei, de cabeza a los 4' salvando Monllor y con un disparo fuertísimo que se fue elevado a los 6'. A los 12', en continuo provecho de los espacios dejados por Ferro, Jorge Juárez pecó de codicioso cuando eligió tirar, afuera por poco, en vez de ceder a Albertengo que entraba solo. Parecía estaba al caer el segundo tanto albiceleste.
De todos modos, al igual que en la primera mitad, la intensidad terminó por bajar. A la visita le costaba cada vez más hacerle frente a la firme defensa de Gimnasia, más que ejecutar centros elevados que eran capturados por Joaquín Bigo. El Lobo, cuando encontraba el hueco se lanzaba a por otro gol, como en una chance de Molina que terminó por complicarse demás con un disparo cruzado a los 26'.
El único remate decente del club de Caballito llegó recién cuando ingresó su habilidoso, Ricardo Blanco, quien a los 33' incomodó a Bigo con un tiro de media distancia. Más allá de eso, el encuentro ya era poco interesante. La última para el local la tuvieron Juárez y Menéndez, pero entre ambos se incomodaron y no pudieron concretar. Para resaltar antes del silbatazo final, las expulsiones de Biggeri en el banco visitante, por sus desairadas protestas, y la de Walter Manduca en el banco jujeño.
Gran recompensa para el gran sacrificio realizado en todas sus líneas para los jugadores de Lobo. Llegó a la 3º ubicación con 50 puntos, comandando el lote de los equipos que pelearán en las cinco fechas restantes el ingreso al reducido. Se viene otro duelo trascendental, cuando Gimnasia viaje por primera vez en su historia a Los Polvorines para enfrentar a San Miguel, que es su más inmediato perseguidor en la 4º colocación con 49 unidades.