Otra vez cerca del final.
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| Foto: Prensa GyE. |
Tras el triunfo agónico de la semana pasada, Gimnasia volvía tras casi un mes de ausencia al 23 De Agosto. Como líder de la Zona B, el panorama era ideal para seguir la racha de triunfos esta vez ante su gente. No iba a ser nada fácil, contra un Estudiantes de Río Cuarto que es una de los acechadores y quería intentar acercarse.
Lo que parecía ser un arranque regular, con los dos equipos midiéndose, en la soleada tarde de invierno en Jujuy, se vio interrumpido por un error de Emiliano Endrizzi que terminó siendo fatal. A los 4' el lateral izquierdo realizó mal un pase al medio, cediendo la pelota a Martín Garnerone, quien con un pasillo libre se acomodó y fulminó a Milton Álvarez. Abajo en el marcador de forma muy temprana, un contexto poco conocido para el equipo de Matías Módolo.
El Lobo intentó reponerse de inmediato, siendo Francisco Molina el primero en rematar al arco con un tiro que, por su rebote, incomodó a Brian Olivera. Sin embargo, había desacomodos atrás, que Estudiantes intentó aprovechar. A los 8' Milton neutralizó con una buena anticipación una entradera al área, mientras que Mauro Valiente probó desde lejos sin éxito a los 18'. La respuesta de Gimnasia casi significó la igualdad, con un misil con efecto de Hugo Soria que pasó muy cerca del arco visitante.
Gimnasia de a poco fue mereciendo el empate, dominando las acciones con un Francisco Maidana muy activo y un León que en ventaja dejaba jugar. También logró acercarse al gol por medio de dos tiros de esquina, en el primero con Cristian Menéndez, sacando muy bien Olivera, y luego un cabezazo desviado de Guillermo Cosaro, ambos antes de la media hora de juego. Ya cerca del descanso, el ritmo del juego bajó, con Estudiantes logrando ralentizar el juego.
El complemento fue muy complejo para el conjunto albiceleste. De entrada los dirigidos por Iván Delfino se plantaron bien cerrados, cumpliendo su objetivo de bloquear el acceso a su área. Cuando las pelotas llegaban, entre Gonzalo Maffini y Sergio Ojeda las sacaban como podían. Así, le costó a Gimnasia generar situaciones como en la primera mitad.
Para colmo de males, con los espacios atrás, parecía que el segundo del cuadro cordobés estaba al caer. A los 14', Agustín Fontana perdonó de manera insólita, aunque tan solo dos minutos después tuvo revancha. Mal despeje de Bruno Palazzo, que le quedó a Valentín Fenoglio. Este cedió de cabeza a Fontana, un par de metros delante de el. Cuando el delantero definió todos pensaron que la acción se anularía por fuera de juego, pero el línea corrió hacia el medio. La cuestión del debate terminó siendo la posición de Palazzo, quien habría habilitado al rival desde la línea de fondo, pero que al terminar la jugada se encontraba fuera de la cancha. Poco importó eso al rival, que se encontraba con una ventaja contextualmente amplia, por el marcador y por el desarrollo del juego.
Como revertir la cuestión era el asunto cuando llegó una buena para el Lobo. Nicolás Dematei, uno de los puntos altos cuando por necesidad subía al ataque, fue derribado por Fabio Vázquez dentro del área, o al menos eso compró Lucas Cavallero, cercano a la jugada. Esta vez al que le importó poco fue a Santiago Camacho, quien puso el descuento con un tiro fuerte apenas hacia su izquierda a los 23'.
Ahora esperanzado, Gimnasia fue con más empuje que otra cosa. Menéndez volvió a probar de cabeza a los 28', pero le faltó dirección. Respondió Estudiantes con un tiro rasante de Fenoglio, desviado apenas. Rodrigo Velázquez, ingresado desde el banco, tuvo la suya para poner tablas a los 34', definiendo por encima del travesaño. Ya casi en tiempo cumplido, mala salida de Álvarez y Fenoglio lo erra. Era empatarlo o terminar de perderlo.
El punto de quiebre fue pasando los 45'. Endrizzi devolvió una pelota bien alta al área, apareciendo libre Alejandro Quintana para bajarla y vencer la humanidad de Olivera. Euforia en el 23 De Agosto ante una igualdad agónica.
Entre las quejas exageradas de la visita se retiró con mucho mejor sabor de boca Gimnasia, sabiendo que con la unidad sigue como puntero por otra fecha, con un invicto de nueve partidos encima. Con otra perspectiva y sacando del panorama las formas del partido, por segunda vez seguida no pudo ganar en su casa. Esto es paso a paso, y por el momento deberá concentrarse en otra parada fuera de Jujuy para buscar una victoria, ante el último de la Zona B, Talleres de Escalada el próximo sábado.